¿Qué?

Esta es la frase que más repito últimamente cuando termino de estudiar. Tras las intensas horas de estudio termino con tal cansancio mental que me es difícil seguir una conversación de manera normal, así que me paso todo el rato preguntando: “¿qué?, ¿Cómo?, ¿Me lo puedes repetir?” Y la mejor frase es “Perdona es que no te estaba prestando atención ¿qué decías?” Y no porque no quisiera prestarle atención, es que mis neuronas no dan más de sí. Así de simple.
Tras ocho horas de estudio hay días en los que mi mente se pone en modo off y no hay manera de salir de allí. El resto del día sobrevives, vas como una motita de polvo que vuela por el aire. Que hay que cenar, pues se cena; que hay que salir a correr, se sale; que es hora de dormir, pues buenas noches. Y no pienso en nada más, porque no puedo ¡Mi cerebro no da más de sí! Simplemente haces, lo que tienes que hacer (o lo que te dicen, que no estás tú para pensar mucho).
Pero el mayor problema no es que no puedas seguir una conversación trascendental o básica (porque hay días que ni eso). Para mí, el mayor problema son los despistes. Muchas veces mientras estoy estudiando me acuerdo de cosas que tengo que hacer después de estudiar, como llamadas, contestar a mails pendientes, o recados varios pero, en el momento en que me levanto de la mesa de estudio, con tal de acordarme de respirar me vale.
Algunas veces me fuerzo a hacer las cosas porque si no se me acumulan para el fin de semana, pero a veces es peor el remedio que la enfermedad. Por ejemplo, el viernes pasado os puse que iba a hacer un bizcocho. Acabé bastante cansada el viernes por la tarde pero, como lo tenía pendiente, me puse a ello. El problema fue que, tras meterlo en el horno, me puse a hacer otras cosas y se me olvidó por completo (yo a esto le llamo memoria selectiva de la mala). Y en un momento que pasé por la cocina, noté el olor a “bizcocho chamuscao”…. Me dio tanta rabia que esta semana hice otro y, como lo prometido es deuda, aquí os dejo la foto.

Antes de terminar este post, quería daros las gracias por los ánimos para el examen. Prometo seguir contando semanalmente como me va el estudio que, como muy bien dijo C.C , serán tres meses de estudio a saco. ¡Feliz fin de semana!